Los sitios de posible colocación de un implante mamario son múltiples, como ser sub musculares (debajo del músculo), sub glandulares (debajo de la glándula), sub faciales o en planos mixtos. Por lo que cada paciente, evalúa con nuestro asesoramiento, cual de todos es el que mejor se adecue a su caso en particular. Colocamos en la mayoría de los casos (95 %) implantes retro musculares. Por los beneficios, en el corto y largo plazo, que tendrán las pacientes.
Generalmente la compañías fabricantes recomiendan cambiar los implantes cada 10 años, pero se ha demostrado que los implante se deben retirar o cambiar cuando haya contractura o encapsulamiento de la misma o que requiere un poco más de volumen.
Las vías de acceso que más frecuente uso es la peri-areolar en caso en caso que haya excedente de piel, hacemos una cicatriz vertical o areolar que es la forma circular.
Si, recomendamos tener un estudio previo de la mama. Para saber del estado de la misma, y que sirva de comparación y control, para los posteriores controles con el ginecólogo. Se recomienda sonomamografia en caso de que haya antecedentes de cáncer se recomienda una mamografía.
Lo hematomas, seroma e infección no son frecuentes y si suceden los hematomas y los seromas se evacuan en el momento que se presenten y si hay infecciones se retiran los implantes se da tratamiento y luego de los 3 meses se colocan otros implantes nuevos.
El organismo hace una reacción local a cuerpo extraño o por una fricción que puede ser a lo largo del tiempo por el espacio muerto de algunos implante que no se adhieren al tejido, actualmente existen implante a base de poliuretano que minimizan los seromas y el encapsulamiento.
Usualmente hay un proceso de edema e inflamación que al transcurrir los días los senos van tornándose de forma más natural.
Es cuando el organismo cicatriza en forma exagerada y dura, sobre el implante. Llevando a la deformidad del mismo y en ciertos caso produciendo dolor. Se da en menos del 2 % de los casos y tiene solución.
Las compañías fabricante de los implantes no recomiendan amamantar , pero usualmente la mayorías de los pacientes amamantan a sus niños después de un año de la cirugía
Se sabe que cada persona tiene una carga genética, y que esa genética es el principal indicador de probable cáncer mamario. La colocación del implante, NO altera dicha carga genética, por ende, NO tiene vinculación directa con el incremento del riesgo del cáncer mamario.